7:45 a.m.  

Ya estamos en el instituto… ¡y eso que lo dejamos todo preparado ayer! ¡Qué jaleo! Así debía de estar el foro a la hora del mercado. Todo son carreras de un lado a otro, arriba y abajo. ¡Venga, chicos, que hoy es vuestro día! Vais a tener a los alumnos de 1º y 2º de ESO y a los de 1º del Ciclo a vuestra disposición toda la mañana.

Llevamos casi dos meses preparando este día. ¡Cuántas tardes  preparando, organizando, dibujando, recortando, pintando, pegando…! Lo peor ha sido sin duda esta última semana, solo nos faltaba dormir aquí.

8:30 a.m.

Suena el timbre de entrada a clase. Entran los alumnos, casi todos son chavales del barrio, pero en pocos minutos van a ser pompeyanos, atenienses,  salduienses, troyanos… Los hemos dividido en grupos para que puedan participar en todas las actividades que hemos preparado.

9:30 a.m.

Parece que todo el mundo está en su taller: mosaicos, mitología, indumentaria, escritura en papiro, tablillas enceradas, graffiti pompeyanos, danzas griegas, juegos de mesa y en el patio.

10:15 a.m.

Algunos profesores de lenguas bárbaras se han animado a vestirse y llevan el peplo y la toga con mucha dignidad.

10:35 a.m.

Se reanudan las actividades. De vez en cuando se ve a algún troyano o pompeyano que se ha perdido y no encuentra su taller.

1:30 p.m.

Las fuerzas empiezan a flaquear. Se observa alguna mella en el entusiasmo que derrochábamos en las primeras horas, pero la satisfacción de ver que casi todo el mundo está disfrutando viene a ocupar el hueco dejado por las emociones iniciales.

2:30 p.m.

Todos agotados. Da pena despojarse de las túnicas, de los cascos, de las togas, los peplos… ¡Tranquilos, chicos, que volveremos a sacarlos para las Saturnales!

8:30 p.m.

Ya hemos descansado un poco. Toca evaluar la jornada. Ha habido muchos fallos. Tomamos nota de todo y lo tendremos en cuenta en próximas ediciones… y eso que está claro que los Hados nos han sido favorables, pero somos simples mortales y, por más que lo intentemos, nunca podremos ni acariciar la perfección. Eso sería ὑβρις, soberbia, y… ¡ya sabemos cómo se las gastan los dioses con los que se pasan de la raya!

Ha sido muy emocionante ver que el Mundo Clásico, que rara vez es protagonista de nada, aunque no sea más que por un día ha captado la atención de nuestra comunidad educativa. ¡Igual todavía no estamos tan muertos!  Siempre nos queda la esperanza, como a Pandora.

Gracias a todos los que habéis hecho posible esta Jornada: alumnos, profesores  (especialmente los del PCE, tenéis siempre soluciones para todo), personal no docente (os hemos dado trabajo extra) y equipo directivo (¡qué paciencia habéis tenido, Pilar y Jesús!)

GRATIAS PLURIMAS OMNIBUS

ΠΟΛΛΑΣ ΕΥΧΑΡΙΣΤΙΑΣ ΠΑΣΙ

Marisa Falcón. 

Departamento de Cultura Clásica.